Desde esta madrugada, los municipios bonaerenses de Tigre y San Fernando llevaron a cabo operativos para asistir a los vecinos afectados por la sudestada, que produjo el anegamiento de varias zonas, aunque no se registraron evacuados.
Sobre la situación, el intendente de Tigre, Julio Zamora, explicó: “Tuvimos una alerta del Servicio de Hidrografía Naval para las de 10 de la mañana con un pico máximo de 3,60 metros. Afortunadamente, no fue tan grave la crecida, ya que a esa hora se llegó a 2,95 metros, lo que provocó el anegamiento de algunas calles”. Y agregó: “Por eso, junto a la secretarías de Protección Ciudadana, Política Sanitaria y Desarrollo Humano y Servicios Públicos, que conforman lo que se denomina el COEM (Comando de Operaciones de Emergencias Municipales), estuvimos presentes acompañando a los vecinos para ver si había situaciones con anegamientos en casas, algo que no se comprobó”.
Por último, el mandatario del distrito ribereño concluyó: “Es recomendable no caminar por las calles anegadas, no sacar la basura para evitar mayores inconvenientes y esperar a que el río baje para seguir con normalidad, ya que los vecinos de Tigre estamos acostumbrados a vivir con este fenómeno natural”.
En tanto, el director general de Protección Ciudadana de San Fernando, Néstor Piseta, señaló: “Gracias a Dios no tenemos evacuados y lo que estamos haciendo es entrar y salir con los camiones, ingresando a las casas, ayudando y asistiendo. Recomendamos al vecino no sacar la basura y ante cualquier necesidad comunicarse con Defensa Civil al 103. Estaremos hasta que se vaya la última gota de agua, todas las áreas del Municipio están a disposición de la comunidad”.