Alrededor de dos millones de habitantes de la Zona Norte del Gran Buenos Aires se sumarán a mediados de 2011 a la red de agua potable, que se producirá en la planta potabilizadora que construye AySA en la localidad tigrense de Dique Luján, con una inversión de 2.800 millones de pesos.
«El emprendimiento, al que se denomina ‘Juan Manuel de Rosas’, registra una avance de obra de más del 40 por ciento, y es el de mayor envergadura en materia de agua potable encarado en los últimos 50 años en el país, e incluso en América Latina», aseguró el presidente de la firma estatal, Carlos Ben.
Unas 2.500 personas trabajan actualmente en la construcción de la planta, que contará con dos tomas de agua: en los ríos Luján y Paraná de las Palmas, cerca del Puerto de Escobar.
Una primera etapa se habilitará en septiembre de 2011 -la totalidad de la obra finalizará en 2012- y beneficiará a dos millones de habitantes de los partidos de Tigre (centro, Benavídez y Dique Luján), San Fernando, San Isidro, Vicente López y San Martín.
También permitirá avanzar en la expansión del servicio en el resto del partido de Tigre y en los distritos de San Martín, Tres de Febrero, Hurlingham, Ituzaingó y Morón.
Al resaltar la importancia de la obra, Ben sostuvo que la planta «permitirá a Aysa junto con la (planta) General San Martín (de Palermo) y la de Bernal garantizar la provisión de agua potable a los 11 millones de personas que residen en el área de la concesión y además comercializar parte por fuera de la misma».
El directivo contempla además la posibilidad de comercializar agua potable al por mayor en barrios privados bajo la modalidad de «agua en bloque», tema sobre el que ya conversó con los intendentes de los partidos de Escobar y Pilar.
Por este método, la empresa provee el agua a través de un acueducto que cobra por metro cúbico entregado, mientras que «el cliente» se encarga de la distibución por redes domiciliarias.
Ben destacó que Aysa tiene un Plan Estratégico para dotar con el 100 por ciento de los servicios al área de concesión, con un plazo de 10 años para el que se establecieron inversiones por 20 mil millones de pesos.
«Entre las obras terminadas y pagadas en estos cuatro años -$5.500 millones- y los proyectos en trámite y en ejecución podemos decir que hemos utilizado casi la mitad de esa inversión», indicó el funcionario.