El acto congregó a autoridades municipales y veteranos de guerra y familiares de caídos.
En Rincón de Milberg, el Municipio presentó el 79° espacio público renovado: la Plaza Madre de los Héroes de Malvinas, que ahora cuenta con nuevos juegos, iluminación, parquización y veredas. Durante el encuentro, se entregaron reconocimientos a veteranos de guerra y familiares de caídos, a 40 años del conflicto bélico.
«Se juntan muchas emociones. Para nuestra gestión, una plaza tiene por objetivo siempre a los niños, por eso celebramos que este sea el espacio público número 79 puesto en valor por el Municipio. Eso marca una persistencia de un trabajo profundo durante estos últimos tres años para renovar todo el espacio público de Tigre», destacó el intendente Julio Zamora.
«Por otro lado, se trata de un evento recordatorio con un homenaje especial a las madres de los héroes de Malvinas, ese es el nombre de la plaza, y simbólicamente al Crucero General Belgrano, que dejó tantas vidas de argentinos valientes en el Atlántico Sur», continuó el mandatario.
Además, el jefe comunal ratificó su compromiso con la Causa Malvinas: «La necesidad impostergable que tenemos como comunidad de poner siempre en la agenda ciudadana la recuperación de las islas como uno de los objetivos que tenemos como Nación y eso forma parte también en la agenda del Municipio».
La inauguración comenzó con un espectáculo de magia del mago Reymon. En el acto central, Zamora brindó unas palabras y entregó medallas distintivas a excombatientes y familiares de caídos. Luego, el jefe comunal realizó el corte de cintas que dio por estrenado el espacio ubicado en Camino de los Remeros y Laberinto Borges.
La atracción central de la nueva plaza son los juegos inspirados en el crucero ARA General Belgrano, la histórica embarcación hundida en la Guerra de Malvinas.
Luego de la inauguración oficial, las autoridades descubrieron una placa con la inscripción «Madre de los Héroes de Malvinas». También presentaron un banco celeste, que representa el compromiso con las políticas destinadas a jóvenes, y otro de color rojo, en homenaje a las víctimas de violencia género. Para finalizar el acto, plantaron un lapacho como símbolo de un pueblo que no se doblega.