Con la draga ya instalada en el Canal Villanueva, un grupo de operarios se disponía a colocar los caños sobre la calle Brasil, para rellenar el terreno aledaño a Punta Querandí donde semanas atrás se cavó una zanja y se levantó un terraplén, cuando fueron detenidos por un vecino. Esto ocurrió por la mañana.
El capataz, que se recluyó con el resto de los trabajadores en el country San Benito, reconoció que tenía la orden de extender el conducto para volcar la tierra en el lote. Es decir, inhabilitar la circulación por un camino público y realizar la obra pese a la prohibición judicial.
Ante esta situación, desde el Movimiento en Defensa de la Pacha (MDP) advierten que «es inminente que EIDICO vuelva a violar la medida cautelar que prohíbe este tipo de actividades en varias parcelas ubicadas entre el arroyo Garín y Punta Querandí».
Por las tarde, hasta el lugar se acercó el delegado de Dique Luján, Hugo Cerrillo, y el concejal Alejandro Forlong. El primero prometió que averiguará si las autoridades municipales están notificadas de la realización de estos trabajos.
Desde el movimiento que lucha por la preservación del sitio sagrado y nuclea a miembros de pueblos originarios, ambientalistas, docentes y vecinos remarcan que están «en estado de alerta ante todos estos hechos que vulneran derechos y violan medidas judiciales».
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